Dudo profundamente.
Quizás lo hiciera porque ese era el nombre que mi padre pensó alguna vez ponerme. Aunque al final no me lo puso. Tal vez alguna parte de mi cerebro tiene tanto de ese nombre que estuve a punto de responderle con un rotundo 'sí´.
Debí hacerlo, a ver qué pasaba después.

Todos somos alguien en parte que no somos realmente. Yo me pregunto a menudo quién soy realmente...
ResponderEliminar