6 ago 2009

No todo es coser y cantar

Siento cómo una vez más se me entreabren las costuras de mi cuerpo, de mi pecho... por dentro, pero no me asusto, no me rasgo las vestiduras ni por un momento. Sólo sigo, sigo siendo abanderada de tus besos, como mi único remedio. Agarrándome a tu vela, y que nos lleve el viento.Me olvido de las posibles cicatrices y me entrego, a tus tantos peldaños agrietados, olvidados de mi olvido y tú... sin embargo, me cuelgas de las perchas del tiempo, para que me dé cuenta de que no siempre es todavía, pero entonces me enredo, y desciendo, de las nubes de tus cielos, y toco suelo. Para entender que no todos miramos por las mismas gafas el mundo. Que no todos usamos las mismas suelas de zapatos, y gracias a eso, no todos las llevamos igual de desgastadas, ni tan siquiera nuestros poros se llenan y vacían al mismo tiempo. Que tu aroma habla, y tus miradas atraviesan mi enrevesado armamento, mientras mis corazas se derriten al tiempo, que percibo todo esto. Mientras mis dedos se posan sobre tu pecho... por dentro... para notar si aún, a ti, te queda, escondida, callada, rasgada, alguna de tus costuras tantas veces remendadas.

1 comentario:

  1. Lo mejor es que siempre se podrán remendar... por mucho que toquemos fondo! me ha encantado todo, desde la primera palabra hasta la última :)

    Ö Has reedecorado tu blog ehh...!! mola!!
    saludosss!!

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Esto es Absolutamente Genial.

Extracto de la película "El lado oscuro del corazón"

No te salves, Mario Benedetti